Por Evelin Anzola / Kienyke.com
El representante a la Cámara por el Polo Democrático Alternativo, Wilson Arias ha recopilado las pruebas con las que han denunciado el acaparamiento de los baldíos en todo el país, asegura que grandes emporios económicos nacionales y extranjeros están siendo apoyados por el Gobierno Nacional para apropiarse de las tierras que deben estar en manos de los campesinos, y para ello se está tramitando un proyecto de ley que legalizaría ese acaparamiento, igualmente señala que en la construcción de la iniciativa esta Néstor Humberto Martínez, que según Arias, es abogado y asesor de Luis Carlos Sarmiento Angulo.
¿Qué es lo que está denunciando?
Las tierras que tenían como destino los campesinos pobres, por mandato de la ley, es decir las tierras baldías de la nación, le fueron entregadas a grandes capitalistas nacionales y extranjeros. Lo hicieron de manera ilegal y lo hicieron con apoyo de bufetes de abogados y de firmas auditoras, las más prestigiosas firmas están comprometidas en el diseño de una estrategia irregular y fraudulenta para hacerse a los baldíos.
¿Cuál es esa estrategia?
Consiste en el fraccionamiento de la compra, porque la norma dice que tratándose de las tierras baldías de la Nación nadie puede acumular más de una unidad familiar. Para poderse quedar con esas tierras han decidido crear esas empresas fachadas, de forma que cada una puede comprar una unidad familiar colindante y después pueden englobar todo eso en una gran empresa. De esa manera los emporios se quedan con la tierra de los campesinos, burlando el sentido de la Ley 1160 de 1994.
¿Qué empresas se estarían quedando con esas tierras?
Extranjeras, que dicho sea de paso, fui el primero en presentarlas al país, lo empecé a hacer desde el 18 de agosto de 2010. Mónica semillas, compañía brasilera, Black River, que es realmente Cargill, Poligrauup, esta es una empresa italo–española que acaparó tierras en Mapiripán, donde había declaratoria de desplazamiento forzado y por lo tanto prohibición de transar con tierras; El Tejar de Argentina y La Sierra de Chile, esto para mencionar las más emblemáticas.
En las nacionales, encontré al señor Luis Carlos Sarmiento Angulo, denunciamos a Francisco Santos, al grupo Manuelita, al grupo Santodomingo y al Ingenio Riopaila que tantas dolores de cabeza le está casando a este Gobierno.
¿Por qué le está causando tantos problemas al Gobierno Riopaila?
Porque en varias de ellas, al menos en Riopaila, Cargill y Monica Semillas, encontramos que por entonces era asesorado por un bufete de propiedad del exembajador de Colombia en Estados Unidos Carlos Urrutia.
¿Por qué cree que se está permitiendo o promoviendo que esas empresas adquieran las tierras?
Porque tienen mucha representatividad política en este Gobierno, porque dominan el espectro económico político y social de este país, y porque este Gobierno es una junta directiva de esos grandes emporios que dirige desde Casa de Nariño, lo que debía dirigirse democráticamente.
¿Qué están haciendo esas empresas con las tierras?
Básicamente están utilizándolas para la exportación, para los comodities agropecuarios y en una muy fuerte intención de vincular el sector agropecuario a los valores futuros y a las transacciones de bolsa. Por eso hay peligro de que se dé una burbuja en ese campo, ya encontramos una especie de efecto especulativo muy grande con el valor de esas tierras, que no resulta explicable a la luz del mercado mismo de las tierras en Colombia.
Juan Manuel Santos decía que quería quitarle la tierra a la mafia, cuando hice el primer debate le pregunte a Santos, ¿quitarle la tierra a la mafia para entregársela a quién?, tres años después puedo responder, al sector financiero, al especulativo o a los sectores vinculados a la agro exportación preferentemente financiarizada.
¿La ley 160 es débil y no protege las tierras en Colombia?
Eso es una versión falsa y amañada que está auspiciando el Gobierno, esta ley es supremamente clara y ahora nos dicen que hay confusión jurídica, no sé de donde resulta. Los conceptos del Consejo de Estado hablan de la claridad de esa norma, ni siquiera antes de esta ley se podían acaparar baldíos, eso es ilegal y lo dijo el Consejo de Estado en tres conceptos que le dio al Gobierno, y a pesar de eso alega que hay confusión jurídica.
También la Corte Constitucional expresó con suficiente claridad que no se podían acumular baldíos y mucho menos que terminaran bajo artificios en manos de los grandes tenedores de la tierra.
¿Cuáles son las confusiones jurídicas que argumenta el gobierno?
Dos cosas, primero que antes de 1994 no estaba clara la prohibición de acumular baldíos, segundo, que si no habían anotaciones en el registro explicando esta limitación, el particular no estaba informado suficientemente, es decir, alega la ignorancia de la norma. Sin embargo, basta con leer al Consejo de Estado, dice que aún antes de 1994 no se podían acapara baldíos y que esa es una excepción a la retroactividad de la norma, acerca del tema de las anotaciones.
Tengo cómo probar que los empresarios sabían de esas limitaciones, no pueden alegar la ignorancia de la norma, en los conceptos de Brigard y Urrutia le explicaban al asesorado que se trataba de tierras de reforma agraria, que estaba prohibido acumular pero que podían valerse de esa omisión del Estado para quedarse con la tierra, es decir el concepto era una recomendación truculenta, eso se llama fraude a la ley, abuso del derecho y violación del principio de buena fe.
En estos omentos se tramitan proyectos de ley que son contrarios al espíritu de la ley anterior y al esfuerzo de algunos funcionarios valientes que intentaron devolver las tierras a los campesinos.
¿Quién esa tramitando este proyecto?
El Gobierno Nacional, el ministro de Agricultura y los empresarios a través de Nestor Humberto Martínez, que es un abogado asesor de Luis Carlos Sarmiento, también lo ha sido de Pacific Rubiales y sus credenciales son al servicio de los grandes potentados, él y el Gobierno redactan un proyecto de ley para blanquear esas inversiones mal habidas de los ricos de este país, el Gobierno ha tramitado en el Congreso proyectos para amnistiar la inversión extranjera, está empeñado en favorecer a esos grandes inversionistas. Además está traicionando los esfuerzos del Incoder, porque este organismo había presentado demandas para recuperar esas tierras.
El ministro está tratando de embellecer el chicharrón, de ablandarlo y perfumarlo como se perfuman ciertos malos negocios en Colombia.
¿Por qué razón no se visibiliza su trabajo?
Yo creo que por dos razones. Cuando yo hablaba de extranjerización de la tierra hace tres años el país no entendía, ni parte de la academia, ni cierta izquierda prosantista, que no entendía la intención del Banco Mundial cuando decía que había que quitarle la tierra a los anteriores tenedores y dinamizar ese mercado para que quede en las manos mas eficientes. Tarde se dieron cuenta que esa dinámica era para que quedara en manos de las compañías extranjeras.
La segunda razón es que yo llegué al Congreso sin ningún pergamino, sin los grandes apellidos y sin las posibilidades mediáticas que tenían otros congresistas. Esos hechos conspiraban contra mí, igual que ciertas terquedades, me caso mucho con formas y con un procedimiento.
¿En este momento se está entendiendo el debate?
Se entiende una parte, que hay unas tierras que eran para campesinos y que con la ayuda de grandes poderes ha sido usurpada, pero no se entiende que en nombre de la modernización del agro lo que se hace es el desplazamiento de una clase social por otra.
¿Considera que su esfuerzo ha alimentado la imagen de otros?
Con frecuencia ocurre así, yo quiero ser justo, en todos los debates parlamentarios con mucha frecuencia un tema que se origina logra capturar interés y cuando pasa el umbral del interés publico, obtiene el acompañamiento de mucha gente. Por ejemplo varios senadores se interesaron por el tema de la extranjerización de la tierra después de mi cuarto debate.
Yo aspiraría a que ahora gentes de otros partidos me acompañaran en los otros debates. Es que yo quiero que recuperemos las tierras, no solo quiero hacer protagonismo.
¿Ha temido alguna represalia?
Sí. Dentro de las represalias también están las de miembros del Gobierno que denigran de nosotros, cuando yo estaba empezando este debate Gina Parody hizo un montaje donde le dijo al país que yo había distribuido una publicidad política en el conflicto del Sena, lo cual es profundamente falso.
Eso es tan infame y miserable como lo que le hicieron al senador Robledo, Gina nunca lo pudo demostrar, ella se ocultó en los intersticios de los códigos para no decir públicamente a quién se refería cuando lanzaba acusaciones tan gruesas.